
Escándalo cinematográfico: El Gobierno sacrifica a Diego Spagnuolo para proteger a Karina Milei y Javier Milei. ¿Preparan un 'hombre bomba'?
El Gobierno enfrenta un escándalo cinematográfico alrededor del binomio real, Karina Milei y Javier Milei. En medio de la crisis desatada por la filtración de audios que expusieron un presunto esquema de corrupción en la compra de medicamentos, se destaca el sacrificio de Diego Spagnuolo, ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad, para proteger a la secretaria general de la Presidencia y a Lule Menem, allegado de Javier Milei.
Entre tensiones y maniobras defensivas, se percibe un clima de desorientación en el Gobierno al buscar culpables de la filtración en lugar de abordar el problema de fondo. Se señala a sectores kirchneristas como responsables, mientras se intenta proteger a la hermana del Presidente en medio de acusaciones y rumores que profundizan la crisis.
El caso Spagnuolo, bautizado como Karinagate, evidencia un intento de control de daños por parte del Gobierno mediante la remoción del ex funcionario y la designación de un interventor. La incertidumbre crece ante la posibilidad de que Spagnuolo, al sentirse abandonado, se convierta en un “hombre bomba”, desatando aún más el escándalo. Las decisiones tomadas por el Ejecutivo generan más dudas que respuestas, mientras la trama del Karinagate sigue desarrollándose.